Entradas

Mostrando entradas de abril, 2015

IRENE Y OCTAVIO

CUENTO Al abrir la puerta ratifiqué mi corazonada, zapatos regados en el piso, frutas podridas y cáscaras de banano encima de la mesa del comedor, recibos de servicios sin pagar, arena fina en el piso blanco de cerámica; como el sol calentaba a 40 grados busqué algo para refrescarme la garganta y en la nevera encontré una arepa enmohecida, medio vaso de leche,  una tajada de queso y la jarra del agua sudando sin líquido. Seguí hacia la alcoba y la cama sin tender, cortinas y ventanas cerradas con un fuerte olor a sudor seco.  Me tapé la nariz. Octavio empujaba mi equipaje sin hablar. Al fin lo miré y le dije: -¡Deja las maletas ahí! Se quedó pegado al piso, bajó la cabeza y se recostó contra la puerta. El lugar parecía haber sido objeto de un ciclón, quizá era el ciclón de mis pensamientos enfrentados con lo que encontraba después de cuatro meses de ausencia. Hice aseo de forma rápida y le pregunté: -¿Octavio y la empleada porque no lo hizo?   -No la contraté porqu